Somos especialistas en el tratamiento de termitas en Madrid. Las termitas son insectos sociales, viviendo en comunidad, que pueden llegar hasta los 3 millones. La mayoría de ellas no tiene alas, aunque algunas las desarrollan en determinados momentos.
Se alimentan de la celulosa que contiene la madera, que van degradando al irla devorando poco a poco. Hay más de 3.000 especies distintas, aunque solamente unas plagas viven en climas templados (el resto lo hacen en climas tropicales) y se han convertido en una plaga en los entornos urbanos. Pueden suponer un verdadero problema si aparecen en almacenes en los que se guardan objetos de madera, obras de arte o estructuras. Pueden producir daños económicos muy cuantiosos. Les gustan especialmente las vigas, que consumen desde dentro, pudiendo no notarse en principio nada extraño en el exterior de las mismas.
Son bastante difíciles de detectar debido a su pequeño tamaño. Además, huyen de la luz y se esconden en los recovecos que van dejando en la madera. Entre los medios que empleamos para saber si hay termitas está el de escucharlas por medio de aparatos especiales.
Las termitas son capaces de atravesar muros de hormigos, aprovechando huecos o excavando túneles, si de este modo llegan a algún lugar en el que haya madera.
Podemos clasificar a las termitas con la siguiente categorización:
- Termita reina y termita rey: la función de ambos en la colonia es el crecimiento de la colonia (asegurando la reproducción). Apenas se desplazan, pueden vivir más de 20 años y pones miles de huevos.
- Termitas obreras: machos o hembras, forman la mayor parte de la colonia, aproximadamente el 80% del termitero. Se encargan de todo tipo de trabajos, provisión de alimento, limpiezas, construcción de galerías y túneles, etc. Son las que producen más daños, ya que con sus mandíbulas raspan, amasan, cortan y desgarran la madera.
- Termitas Soldados: Su única función es defender la colonia de sus enemigos, solo constituyen el 10% de la colonia. Poseen unas potentes y grandes mandíbulas para llevar a cabo la defensa.
- Termitas Aladas: Tienen la capacidad reproductiva, pues tienen el sistema reproductor completamente desarrollado. Son de color un poco más oscuro que el resto de individuos, siendo así fácilmente reconocibles. En primavera y verano, cuando se dan las condiciones ambientales adecuadas, abandonan el nido de forma masiva (formando enjambres), dispersándose y formando así nuevas parejas reproductoras (rey y reina) dando lugar a nuevos termiteros.
- Termitas neoténicas: Se les denomina también reproductores, pues tienen la misión de sustituir a la reina en caso de muerte o poca productividad de la reina. Se las reconoce fácilmente por una ligera pigmentación en cabeza y tórax.
Como primera opción debe considerarse la adopción de medidas preventivas que impidan el acceso y proliferación, para evitar problemas y proteger su hogar o edificio de termitas.
Las termitas necesitan ambientes que les abastezcan de alimento (madera) y humedad, por lo tanto es importantísimo reducir al mínimo la humedad y proteger la madera. De esta manera minimizaremos la probabilidad de sufrir un ataque de termitas.
Medidas de prevención de las termitas
- Impedir pérdidas, goteras o encharcamientos de agua.
- Si la vivienda cuenta con jardín, sanear el entorno, intentar que las hojas y desechos de las zonas ajardinadas no se almacenen cerca de la casa o de las estructuras.
- Evitar acumular madera en los alrededores, apilar la leña al fondo del jardín sin que esté en contacto con el suelo.
- Mantener siempre una buena ventilación, sobre todo en sótanos y cámaras de aire.
- Separar siempre los muebles de madera de la pared, dejando unos centímetros
- Realizar periódicamente revisiones de grifos, canalones, desagües, etc. para comprobar que se encuentran en perfecto estado de conservación y que no tienen fugas de aguas.